cesarias

lunes, septiembre 04, 2006

Biografía

excepcional.

1. adj. Que constituye excepción de la regla común.
2. adj. Que se aparta de lo ordinario, o que ocurre rara vez.



Tenia una maestra en secundaria, que con la intención de hacernos sentir bien a priori, intentando ayudarnos a sobrellevar la adolescencia, nos decía a los alumnos que éramos especiales por el simple hecho de haber nacido, que pensáramos en la cantidad de espermas que bien pudieron fecundar el óvulo del cual surgimos, que nosotros éramos el esperma ganador de una gran batalla, claro la maestra daba biología, no me imagino a mi maestro de civismo (la buena onda de carbón) diciendo semejante pendejada. Gran Batalla? Ya por eso somos especiales? MANGA, yo estoy convencido que en el momento que ese esperma (que después seria yo) pudo atravesar la barrera, tenia las mismas posibilidades que los demás, que si lo logró uno en especifico no fue por tener mejores cualidades o mayor perseverancia, sino porque fue el primero en lograr su función, nada más. Te imaginas la cantidad de espermas listos para salir, vamos a verlos, solo tenemos que viajar hacia el pasado unos 23 años y algunos meses, ya estamos ahí, enfoquémonos en uno solo, escojamos ese que se ve con muchas ganas, mueve su colita como lombriz con sal. Ahora si, en sus marcas, listos, fuera. Recorriendo un conducto, empujado por una fuerza que no generó, donde van hechos un desmadre, porque no van acomodados por los tipos de genes que contienen, no vaya a ser, se encuentra en un sistema donde todo son iguales, tampoco tienen a un esperma líder que les diga por donde ir; cada vez que he visto una banda de espermas en un microscopio o en la tele, todos están echando desmadre y cada uno jala para donde quiere, peor que cuando te arrastra una ola en la paya o cuando vas en el metro y te quieres bajar en el zócalo, de pronto sale y a chingarle que para eso está hecho, en chinga a recorrer el puto caminito, casi rezando por que la jefa no use DIU porque si no ya valio madres, no tiene luz, bueno tampoco tiene ojos, pero igual es ojete, después de una buena joda, por fin llega. ¡Oh el óvulo!, que cosa tan chingona, sin saber porque, el pobre esperma dice “yo primero” y si antes ya se estaban empujando ahora peor, todos a buscar un lugar donde empezar a intentarle, por fin ya lo encontró, no fue el primero pero tampoco el último, eso ya es algo, ahora, literal, a mover la colita, empujale cabrón!, con un chingo de banda tratando de quitarlo de su lugar, el pobre esperma lucha para entrar y para no ser sacado de la fila, todos corren, gritan, empujan y de pronto... Chingale! que paso, un esperma que estaba del otro lado que nuestro ahora pobre amiguito logra entrar y a los otros ni un gracias por participar.
Analicemos, este wey que logro pasar, tenia algún atributo mayor que el pobre, muy pobre amiguito? Fue más rápido? Más astuto? Más amable con los demás? Le habló bonito al óvulo hasta que se lo ligo?
Nel.
Este wey, no ganó por ser especial, fue el más mediocre de todos, no intento innovar, tomar algún atajo, ser audaz, simplemente siguió las reglas y ganó sin saber como pasó. Gran Batalla?

Que nadie venga a decirme que es especial por eso, si alguien es especial es porque lo digo YO.


C E S A R I A S